Tipos de piel para tus muebles
30.10.2014 00:51Constantemente recibimos consultas acerca de qué tipo de piel es el más adecuado a la hora de comprar un sofá de piel, y en concreto, cuál es la clasificación de las pieles de mejor a peor desde el punto de vista de la tapicería. Pues bien, he aquí un artículo para resolver todas esas dudas que se nos pueden presentar cuando nos planteamos comprar un sofá de piel.
La estructura de la piel se divide en 3 capas:
- Epidermis: Esta capa desaparece cuando se curte la piel (es un 1% del grosor de la piel).
- Dermis: Representa el 84 % del grosor de la piel y es de donde se sacan las diferentes pieles para tapicería. Esta dividida en “Capa de Flor” y “Capa Reticular”. De la “Capa de Flor” se saca la piel de mejor calidad, la que se conoce como “piel auténtica o genuina” (o como se suele ver en inglés, “genuine lether”). Más adelante veremos los diferentes tipos de pieles auténticas que existen, que es en definitiva lo que nos interesa en este artículo. De la “Capa Reticular” se obtienen subproductos de la piel que ofrecen una menor calidad y resistencia que las pieles auténticas pero que son igualmente agradables a la vista y al tacto.
- Tejido subcutáneo: Representa el 15 % del grosor de la piel. De esta parte no se extraen pieles para tapicería.
Por lo tanto la parte que nos interesa es la Dermis, que es de donde se extraen las pieles que se utilizan para tapizar los sofás.
Tipos de piel
Antes de nada cabe decir que el tipo de piel viene definido, en primer lugar,por la calidad de la piel, es decir por la capa de la que procede la piel (capa de flor o capa reticular), y en segundo lugar por el acabado que se le confiere a la piel (espesorada, estepa, natural, …), el cual puede aplicarse indistintamente sobre cualquier piel. Es cierto que existen determinados acabados que son más aptos para pieles de menor calidad por la capacidad que tienen de disimular fallos.
En primer lugar veamos los diferentes tipos de piel auténtica (las que proceden de la “capa de flor”)que existen:
PIEL PLENA FLOR
Es la piel de mayor calidad pues procede de animales que han recibido en vida un trato delicado. Estás pieles pasan exhaustivos procesos de clasificación en los que se rechazan gran número de pieles por no ser aptas para este tipo de piel. Obviamente todo este proceso se refleja en el precio. Estas pieles son las de mayor naturalidad puesto que conservan todo el grano y poro de la piel del animal y se les aplica un menor tratamiento en el proceso de curtido, en contrapartida al ser tan naturales conservan todos los defectos naturales causados por el proceso vital del animal, que se respetan como sello de autenticidad. No se utiliza mucho en tapicería debido a que encarece enormemente el mueble, primero por el coste del material y segundo porque el consumo de pieles aumenta debido al efecto de salvar defectos naturales de la piel.
PIEL FLOR
Son pieles naturales de gran calidad sometidas a un ligero tratamiento para eliminar algunas de las imperfecciones superficiales naturales de la piel. A estas pieles se les iguala el grano, se les aplica un color pigmentado y un acabado a base de lacas que le confieren el tacto característico, y que protegen el material frente al exterior. Este tipo de piel es el más utilizado en tapicería, concretamente en la versión “piel flor espesorada”, que ofrece una piel mullida y esponjosa que da cuerpo y calidez al sofá. Dada la calidad de esta pieles, no es necesario aplicar un grano pequeño para disimular defectos superficiales por lo que suele aplicárseles un grano de 3 a 8 mm. Sin duda es de las mejores alternativas para tapizar un sofá y una de las más vendidas.
PIEL FLOR RECTIFICADA
Es un tipo de piel en el que no se aprecia el poro natural. Son pieles sometidas a complejos procesos de fabricación en los que se aplica a la capa exterior un fuerte tratamiento superficial (lijado) que consigue igualar la textura y elimina casi todas las imperfecciones naturales, manteniendo totalmente las características físicas y de resistencia. Este tipo de pieles son las “todoterreno” de las pieles por su acabado homogéneo (suele aplicárseles un grano pequeño, de 1 a 2 mm, para disimular defectos superficiales) y por su resistencia al desgaste diario. Esta piel es una buena alternativa para disfrutar de un sofá de piel auténtica a buen precio, sin embargo, no transmite la misma sensación de calidad que percibimos con la piel flor espesorada.
Veamos ahora otros subproductos de la piel que también se utilizan en tapicería:
SERRAJE
Es un subproducto de la piel que se obtiene de la capa reticular de la piel. Está formado por fibras menos compactas, por lo que ofrece una resistencia un tanto inferior a cualquier piel auténtica. Para mejorar la resistencia del serraje se aplica un tratamiento superficial a base de produtos sintéticos. Por norma general, en la tapicería se utiliza serraje para las zonas que menos desgaste tienen, como pueden serlo la parte trasera, la base o los laterales de los brazos, y la piel auténtica de una calidad superior (piel plena flor, piel flor o piel flor rectificada) para las almohadas de asiento, respaldo y brazos, que son las que están en contacto directo con la persona que se sienta. Puede ser una buena opción para tener un sofá 100% de piel sin pagar más de la cuenta. No olvidemos que, aunque el serraje es un producto de la parte inferior de la piel, conserva la resistencia, belleza y tacto que sólo ofrece la piel.
ECOPIEL
Producto fabricado con un 25 % de restos de piel mezclados, triturados y ligados con latex y/o algodón. A la vista y al tacto el acabado es muy similar a la piel, sin embargo la resistencia a la luz y al desgaste es muy inferior. Se utilizan en tapicería porque abarantan enormemente el precio y aparentan piel, pero sólo aparentan…
POLIPIEL O PIEL SINTÉTICA
Producto 100 % sintético que estéticamente aparenta piel pero que no ofrece ni de lejos propiedades similares a la piel. Su uso se ha extendido enormemente debido a lo económico que resulta tapizar un sofá con este material. Desde el punto de vista estético, el acabado es muy similar a la piel, pero desde el punto de vista práctico este material ofrece una baja resistencia al uso lo que provoca que se desgarre con facilidad. Recomendamos utilizar este material cuando queremos combinar en nuestro sofá la base en piel y las almohadas en tela, pues estéticamente obtenemos el mismo resultado tapizando la base en piel sintética y el precio es muy inferior. Por lo tanto, este material es adecuado para tapizar las zonas del sofá que no están en contacto con la persona que se sienta (base, contra y base de brazo), pero no es recomendable utilizarlo en zonas expuestas al roce como pueden serlo los asientos, respaldos, cabezales o almohadas de brazo.
Últimamente se ha puesto de moda combinar piel y piel sintética para que el sofá parezca que está totalmente tapizado en piel. En Soffing no nos gusta está práctica ya que, a pesar de que inicialmente el tono de color de la piel y de la piel sintética es idéntico, cada material se comporta de forma distinta, de manera que al poco tiempo pueden aparecer diferentes tonalidades y desgastes entre partes tapizadas en piel y partes tapizadas en piel sintética. Por otro lado, combinar la piel sintética con piel auténtica resta, sin duda, calidad a la pieza y hace que nuestro sofá deje de ser un sofá tapizado 100% en piel genuina. Por lo tanto, no recomendamos combinar la piel con la piel sintética.
Como resumen, Les dejamos un sencillo gráfico donde se refleja la relación calidad-precio de los distintos tipos de piel de los que hemos hablado en una escala de 0 a 10.
Con esto esperamos haberte ayudado a que conozcas mejor cuáles son las diferentes posibilidades que existen a la hora de elegir un sofá en piel. Si todavía tienes dudas y quieres información más detallada puedes ponerte en contacto con nosotros a través del teléfono 570 62 49 o en el correo muebles_yarifel@hotmail.com, estaremos encantados de atenderte. En Yarifel Muebles dispones de una amplia variedad de sofás disponibles en una gran cantidad de colores y distintas tapicerías.